Cada vela Candléïa es una invitación a reducir la velocidad y saborear el momento.
En su estuche de cerámica, nuestras cuatro fragancias delicadas y atemporales despiertan los sentidos y visten tus interiores con una atmósfera poética.
Vainilla – Minimalista y sensorial
Un aliento cálido, un rastro invisible.
Redondo, suave, familiar.
La vainilla se desliza sobre la piel como la luz del invierno.
Nada demasiado. Todo está perfecto.
Una fragancia para redescubrirte.
Monoï-Clementina – Una luz suave, una calma afrutada
La clementina abre la fragancia con su tierna frescura.
Luego viene el monoï, discreto, redondeado, casi aterciopelado.
Un acorde tranquilo y soleado, sin brillos intensos.
La cantidad justa de luz para crear un momento sereno.
Flor de cerezo: minimalista y delicada
La delicadeza de una mañana clara.
Una flor discreta, colocada a la luz.
Aireado, suave, efímero.
Una fragancia que calma sin dejar marca.
Sólo un susurro fresco.
Flor de Algodón – La dulzura de un intermedio
Ni caliente ni frío. Ni floral ni polvoriento.
Sólo una sensación de paz.
Una fragancia discreta que deja espacio.
Un velo relajante, ligero como una caricia.
¿Cómo funcionan nuestras cajas?
En Candléïa no se pide ni una sola vela.
Cada fragancia y cada frasco están diseñados para encajar en unacaja personalizada:
The Signature Box – El resplandor de tres luces: elige3 velasentre nuestras fragancias y colores cerámicos para crear un ambiente único y refinado.
The One Candle Box – La delicadeza de un momento: elige1 velasegún tus deseos, para regalar o para regalarte un momento íntimo.
Cada caja está cuidadosamente preparada, acompañada de papel de seda color marfil y una delicada tarjeta: un verdadero ritual sensorial.